Una compañía de paletas de dulce de Austin, Texas, sacó al mercado
esta semana una nueva golosina orientada a bebés lactantes, con sabor a
leche materna.
Jason Darling, el dueño de Lollyphile, dijo en un comunicado, que la
idea de su novedoso producto se le ocurrió luego de observar que muchas
de sus amigas están teniendo niños y ver como las madres calmaban a sus
hijos con la leche materna.
“Ellas estaban realmente produciendo leche tan deliciosa que podía
convertir el griterío de niño furioso, en uno dócil y contento”,
explicó.
“Yo sabía que tenía que capturar ese sabor”, dijo. “Lollyphile aclara
en el comunicado que sus nuevos caramelos no contienen leche real, dado
que esto requeriría de “ejércitos de bombeo de las mujeres”, afirma en
tono de broma.
Las paletas de edición limitada y de venta a través de Internet, no
son baratas. La compañía vende un paquete de cuatro paletas a 10
dólares. Una caja de 36 paletas Lollipops de leche materna cuesta 58
dólares.